....No
somos un cuerpo físico, no somos nuestros pensamientos, ni nuestras emociones.
Somos
espíritu Inmortal, que un día decidió jugar un juego y encarnar un cuerpo físico
olvidando de dónde procedía para experimentar un mundo limitado. Y se durmió
olvidándose de sí mismo, quedando preso del sueño.
Y
para dar más verosimilitud al juego programó un guardián del juego: el ego.
El
ego es un programa de limitación y separación que se incorporó al subconsciente
universal para evitar que seamos capaces de oír la voz de nuestro Ser, que
procede del corazón (el corazón es nuestro nexo de unión con nuestro Ser Inmortal).
El
corazón está escondido ahí, en nuestro pecho, susurrando incansable y esperando
paciente, en tanto que la voz del ego se escucha bien fuerte en nuestra cabeza,
colocada en lo más alto para que creamos que es lo que debe de dirigir nuestra
vida.
Y
el ego, al hablarnos, adopta nuestro tono de voz para que creamos que él es
nosotros (no alejes de tu vista que el ego es un simple programa y no tiene
entidad alguna, es un montaje del juego y, por lo tanto, no es real y su fin
último es desaparecer – y lo sabe-)
Y,
para dar más fuerza al juego, creamos el tiempo. El tiempo es una esfera de
humo en la que estamos atrapados. La única forma de escapar del tiempo es vivir
Aquí y Ahora en el Corazón, desde el Presente.
El
tiempo es una mentira para crear un personaje (una máscara) a través del cual
nos expresamos en el mundo material.
Un
personaje tiene unas características que va adquiriendo con el paso del propio
tiempo, mediante las experiencias: se despliega desde nuestra infancia dotándonos
de una serie de actitudes ante la vida.
Pero
es importante no olvidar que nosotros no somos el personaje creado.
Cuando
nos desprendemos de nuestros cuerpos inferiores (físico, etérico, astral y
mental) y tomamos nuevos cuerpos, creamos un nuevo personaje.
La
realidad es que nuestra conciencia sigue permaneciendo inalterada y así podemos
sentirlo.
El
tiempo es un montaje del ego que nos induce a pensar en experiencias vividas
con anterioridad recreándolas una y otra vez de diferente manera (pues nunca
está conforme con cómo actuó el personaje, que, por supuesto, es imperfecto) o lanzándonos
al futuro en un intento de crear un personaje a su medida: un yo ideal imposible
de alcanzar pues hay un dicho que refleja fielmente la forma de actuar del ego:
“hagas lo que hagas la cagas”.
Se
empeña en alejarnos, persistentemente, del presente que es donde sucede la vida
en estado puro, sin juicios, porque sabe que, de vivir el presente, acabaríamos
descubriendo quien somos realmente.
Este
sueño que vivimos es enormemente amplio y vasto. Tanto es así que ya está
totalmente tejido y terminado: es una obra de teatro escrita en sus más mínimos
detalles y los actores (nuestros personajes) lo único que han de hacer es
experimentarla.
Esta
idea es aborrecida por el ego que desea hacernos creer que somos libres para elegir
nuestros actos (es aquí donde muchos lectores se alejan espantados).
Realmente,
ya hemos vivido todas las posibles alternativas a cada experiencia que nos
presenta la vida. Esta idea se desarrolla en el multiverso desplegándose en sus infinitas
probabilidades.
Ten
en cuenta que todo está sucediendo simultáneamente pues el tiempo no existe.
Solo en esta esfera percibimos de manera lineal. Todo está sucediendo ahora.
Estos
temas son ampliamente comentados por David Topi en su blog. Si te interesas
investigar puedes hacerlo en su blog, del que te anexo su enlace..
Pero
podríamos enfrascarnos en multitud de temas como la reencarnación, las vidas
paralelas, los distintos cuerpos del hombre, el dominio de otras razas, las
mancias adivinadoras…. y estaríamos dando vueltas en el laberinto una y otra
vez, eso sí, en distintos niveles. Todos niveles dentro del sueño, del juego.
Lo
que yo te propongo es algo diferente: si llega un momento en el que deseas
despertar del sueño siéntete con el corazón.
Estas
ahí, observando tu mundo, observando las reacciones del personaje que nos hemos
"montado" para experimentar.
Somos
Seres Inmortales, Imperecederos, Inmutables, no sujetos al cambio. No podemos
morir porque somos VIDA.
¿Puedes considerar que la
historia había una vez... sea realidad?
¿Puedes considerar que seamos
soñadores soñando este mundo?
Permíteme un segundo de tu
tiempo:
Siéntate,
Respira
hondo,
Relájate,
Siente
desde tu corazón (con apertura, con
confianza, con inocencia) “Soy un soñador, soñando un sueño de un mundo
material que no puede dañar al Ser Inmortal que Soy”
Respira
y siéntelo.
Sorpresa
¿lo has sentido???
Esta
es tu realidad Inmortal. Estás dormido y si lo deseas, solo si tú lo deseas,
puedes despertar…
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